En un mundo donde las tecnologías digitales están cada vez más presentes en la vida cotidiana, surge una pregunta crucial: ¿cómo preparar a los niños y adolescentes para enfrentar los desafíos del entorno digital? La serie Adolescencia de Netflix ha generado debates sobre este tema al destacar los riesgos emocionales y psicológicos que enfrentan los jóvenes en tiempos de internet y redes sociales. En respuesta, Tigo Bolivia lanzó su programa "Conéctate Segur@", enfocado en cambiar el paradigma del control parental por una educación digital consciente. Este enfoque innovador busca fomentar vínculos saludables entre padres e hijos mediante talleres educativos basados en empatía, regulación emocional y creatividad.
El acceso ilimitado a dispositivos digitales plantea múltiples retos para las familias contemporáneas. Según María Laura Mendoza, gerente de Comunicación Institucional y ESG de Tigo, simplemente instalar filtros o supervisar actividades no es suficiente. El verdadero cambio ocurre cuando se establece una conexión emocional profunda con los jóvenes, comprendiendo sus necesidades y construyendo relaciones basadas en confianza mutua. Los riesgos asociados a una mala educación digital van desde acoso cibernético hasta problemas de identidad personal. Por ello, Tigo propone tres pilares fundamentales: movimiento físico y mental, desarrollo de perspectivas empáticas y regulación emocional adecuada.
Dentro del marco de esta iniciativa, Diego Pérez, facilitador del programa, destaca la importancia de comprender el mundo emocional de los jóvenes. A través de ejercicios prácticos, los participantes aprenden a gestionar emociones como la frustración o la ansiedad, que pueden manifestarse a través de comportamientos compulsivos en línea. Además, el programa subraya la necesidad de coherencia entre lo que los adultos predicen y practican en términos de uso responsable de la tecnología. Cultivar relaciones basadas en respeto y amor incondicional fortalece el entorno familiar y proporciona seguridad emocional a los hijos.
Tigo considera que la clave está en cómo nos relacionamos tanto con la tecnología como con nosotros mismos. Para promover esta visión integral, invita a instituciones educativas, familias y organizaciones comunitarias a sumarse a esta conversación. Las tecnologías deben ser vistas como oportunidades para crecer y conectarse, más que como amenazas. Gracias a programas como "Maestr@s Conectados" y "Conéctate Segur@", liderados por expertos como Diego Toledo, se han impactado más de 500,000 docentes en toda Latinoamérica.
Enfrentar los desafíos del mundo digital requiere herramientas emocionales y éticas sólidas. Solo así podremos acompañar a las nuevas generaciones en su desarrollo sin recurrir al miedo ni al control excesivo, sino desde principios de confianza y amor. Esta perspectiva ofrece una posibilidad histórica para aprovechar al máximo las ventajas de la tecnología mientras mitigamos sus riesgos potenciales.