En un evento destacado de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad 2024 (COP16), los miembros de la "Plataforma Regional de Cambio Climático de Ministerios de Hacienda, Economía y Finanzas de América Latina y el Caribe" anunciaron la creación de un nuevo grupo de trabajo para integrar la conservación de la biodiversidad en las políticas fiscales y financieras de toda la región.
Uniendo Esfuerzos para Proteger el Capital Natural de América Latina y el Caribe
Estableciendo una Agenda de Política Fiscal para la Biodiversidad
El nuevo grupo de trabajo, presidido por Uruguay y Belice, tiene como objetivo construir una agenda de política fiscal que aborde la conservación de la biodiversidad y el capital natural en la región. Este esfuerzo conjunto busca identificar estrategias innovadoras para integrar estos elementos clave en las decisiones y procesos de formulación de políticas fiscales. Al analizar casos de medición del capital natural desde una perspectiva de riesgo fiscal, el grupo de trabajo espera desarrollar enfoques sólidos y replicables que puedan ser adoptados por los países miembros.La diversidad biológica y los ecosistemas saludables son fundamentales para el bienestar y la prosperidad a largo plazo de las naciones de América Latina y el Caribe. Al reconocer este vínculo crítico, este grupo de trabajo se propone desempeñar un papel clave en la integración de la conservación de la biodiversidad en las políticas económicas y financieras de la región. Mediante la colaboración y el intercambio de conocimientos, se espera que los países miembros puedan aprovechar las sinergias entre la protección del capital natural y el desarrollo sostenible.Fortaleciendo la Resiliencia Económica a Través de la Conservación de la Biodiversidad
La conservación de la biodiversidad no solo tiene implicaciones ambientales, sino también importantes repercusiones económicas y fiscales. Al integrar estos factores en las políticas públicas, los países de América Latina y el Caribe pueden fortalecer su resiliencia a largo plazo frente a los desafíos emergentes, como la pérdida de biodiversidad, el cambio climático y la degradación de los ecosistemas.Estudios recientes han demostrado que la inversión en la conservación de la biodiversidad puede generar beneficios económicos significativos. Por ejemplo, se ha estimado que cada dólar invertido en la protección de los ecosistemas puede generar hasta 30 dólares en servicios ecosistémicos y otros beneficios económicos. Además, la preservación de la biodiversidad puede contribuir a la seguridad alimentaria, la regulación climática y la mitigación de desastres naturales, lo que a su vez se traduce en ahorros fiscales y mayor estabilidad económica.Aprovechando Oportunidades de Financiamiento Innovadoras
Más allá de las políticas fiscales tradicionales, el grupo de trabajo también explorará mecanismos de financiamiento innovadores para respaldar la conservación de la biodiversidad. Esto puede incluir instrumentos como impuestos verdes, pagos por servicios ecosistémicos, bonos de conservación y esquemas de compensación por pérdida de biodiversidad. Al aprovechar estas herramientas financieras, los países de la región podrán movilizar recursos adicionales para invertir en la protección y restauración de sus valiosos ecosistemas.Asimismo, el grupo de trabajo buscará fortalecer los vínculos entre el sector público y el privado, fomentando la participación de empresas, inversores y organizaciones de la sociedad civil en la financiación de iniciativas de conservación de la biodiversidad. Al alinear los incentivos y los intereses de múltiples partes interesadas, se podrá generar un mayor impacto y una mayor sostenibilidad a largo plazo.Construyendo Capacidades y Compartiendo Conocimientos
Para garantizar la efectividad y la sostenibilidad de este esfuerzo regional, el grupo de trabajo se centrará en el desarrollo de capacidades y el intercambio de conocimientos entre los países miembros. Se organizarán talleres, seminarios y programas de capacitación para que los funcionarios públicos, los expertos en políticas y los tomadores de decisiones puedan adquirir las habilidades y los conocimientos necesarios para integrar la conservación de la biodiversidad en sus respectivos sistemas fiscales y financieros.Además, se fomentará el intercambio de mejores prácticas, estudios de caso y lecciones aprendidas entre los países participantes. Esta colaboración regional permitirá a los miembros aprovechar los éxitos y las experiencias de sus pares, acelerando así la adopción de enfoques innovadores y efectivos.