Un reciente informe publicado por el Centro de Estudios Demográficos de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) revela que los progenitores cuyos hijos se encuentran sin empleo experimentan un aumento significativo en los síntomas de depresión. Este estudio, realizado a nivel europeo, examina a 14.556 personas mayores de 50 años en ocho países diferentes. Los resultados indican que este fenómeno es especialmente pronunciado en naciones con sistemas de bienestar menos protectores, como España, Italia, Polonia y la República Checa. Aunque Francia presenta una excepción, ya que no se observan diferencias notables, en general, las madres en España muestran un incremento más acusado en los síntomas de depresión, especialmente aquellas con menor nivel educativo.
El estudio analiza datos de la "Survey of Health, Ageing and Retirement in Europe" de 2022, enfocándose en 12 síntomas asociados a la depresión. Los hallazgos sugieren que los padres con hijos desempleados enfrentan una carga emocional adicional, lo cual puede ser más agudo en sociedades donde las políticas de apoyo al desempleo son limitadas. En estos contextos, los progenitores tienden a asumir un papel más activo para ayudar a sus hijos, lo que puede generar estrés y ansiedad. Por ejemplo, en España, las tasas de desempleo entre los jóvenes son altas, alcanzando el 13%, lo que agrava la situación.
Los investigadores destacan que en países con sistemas de bienestar más robustos, como Suecia y Dinamarca, el impacto en la salud mental de los padres es menos evidente. Esto se debe a que estas naciones ofrecen mayor protección a los desempleados, reduciendo la necesidad de que los padres intervengan directamente. En contraste, en España, Italia, Polonia y la República Checa, los sistemas de bienestar son menos generosos, lo que lleva a los padres a tomar medidas adicionales para apoyar a sus hijos. Esta dinámica puede resultar en un mayor desajuste económico y emocional para las familias.
Además, el estudio subraya que las madres en España con hijos desempleados presentan un aumento significativo en los síntomas de depresión, particularmente aquellas con menor nivel educativo. El impacto es más notable en este grupo, ya que carecen de recursos suficientes para mitigar las consecuencias negativas del desempleo. Por otro lado, los padres con mayor nivel educativo no muestran una relación tan estrecha entre el desempleo de sus hijos y la aparición de síntomas depresivos, probablemente debido a su capacidad para acceder a recursos alternativos.
Esta investigación abre nuevas perspectivas en el campo de la salud mental de las personas mayores, sugiriendo que la influencia de las generaciones más jóvenes debe ser considerada en estudios futuros sobre bienestar y desigualdad en salud. Al integrar esta dimensión, los expertos podrán obtener una comprensión más completa de cómo las condiciones económicas y sociales afectan la calidad de vida de las familias en toda Europa.