El entrenador del Olympiacos, Georgios Bartzokas, destacó la importancia de mantener la compostura emocional durante el cuarto enfrentamiento de los playoffs de la Euroliga frente al Real Madrid. Con una victoria ajustada de 84-86, el equipo aseguró su pase a la Final a Cuatro en Abu Dabi. En un partido cargado de intensidad y estrategia, Bartzokas reconoció que manejar la presión fue clave para superar a uno de los favoritos del torneo. Además, resaltó el desempeño de figuras como Sasha Vezenkov y Kostas Papanikolau, quienes contribuyeron decisivamente al éxito colectivo.

Bajo una atmósfera tensa, el duelo contra el Real Madrid representó un desafío mayúsculo para el Olympiacos. El técnico explicó que, aunque comenzaron con una ventaja considerable, el encuentro se definió por detalles mínimos. "Sabíamos desde el inicio que nos enfrentábamos a un rival experimentado y talentoso", expresó Bartzokas. Reconociendo la dificultad de jugar contra un equipo acostumbrado a alcanzar grandes logros, subrayó que controlar las emociones bajo tanta presión resultó esencial para evitar errores costosos.

Uno de los momentos críticos del partido fue la actuación inicial del jugador búlgaro Sasha Vezenkov, cuya entrada tardía generó cierta preocupación. Sin embargo, Bartzokas justificó esta decisión señalando que necesitaba tiempo para adaptarse al contexto del juego. "La presión sobre él ha sido enorme tras su regreso de la NBA. Le dimos espacio en el banquillo para evaluar mejor el desarrollo del partido", comentó. La estrategia funcionó, ya que Vezenkov retornó con fuerza en la segunda mitad, anotando puntos cruciales.

Otro elemento destacado fue el rol del griego Kostas Papanikolau, quien lideró al equipo en los minutos finales con su precisión desde el perímetro. Según Bartzokas, este tipo de contribuciones refleja la filosofía de trabajo en equipo que caracteriza al Olympiacos. "No solo dependemos de un jugador estrella; nuestro éxito radica en el compromiso colectivo", afirmó. Desde la defensa hasta el ataque, cada miembro del equipo cumplió su función de manera ejemplar.

Finalmente, el triunfo ante el Real Madrid no solo representa un paso importante hacia la final, sino también un testimonio del valor del trabajo en equipo y la capacidad de adaptación emocional. A pesar de las adversidades, el Olympiacos demostró que puede competir a alto nivel gracias a la sinergia entre sus jugadores y el liderazgo estratégico de su entrenador. Este resultado reafirma su posición como un contendiente serio en la Euroliga.