En la jornada del viernes, el oro alcanzó un récord histórico al superar los 3.200 dólares por onza, impulsado por crecientes tensiones comerciales y temores sobre una posible recesión global. Durante las primeras horas de la mañana, este metal precioso llegó a cotizar en 3.220,08 dólares, destacándose como refugio seguro para inversores preocupados por la volatilidad económica. Este avance sigue a otro máximo registrado días atrás tras anuncios relacionados con aranceles internacionales.
En las primeras horas del día, específicamente a las 5:30 am (3:30 GMT), el valor del oro escaló considerablemente debido a la incertidumbre generada por medidas proteccionistas implementadas recientemente. Estas acciones han llevado a un aumento significativo en su demanda como activo seguro. El contexto actual, marcado por decisiones políticas que afectan al comercio internacional, ha desencadenado movimientos en los mercados financieros globales.
A lo largo de la semana, se observaron fluctuaciones notables en el precio del oro. Un ejemplo clave ocurrió cuando tocó un nivel previo elevado el pasado 3 de abril, fecha en la cual se anunciaron sanciones comerciales amplias por parte del gobierno estadounidense. Esta medida incrementó aún más la ansiedad entre los agentes económicos mundiales, quienes buscan protección en instrumentos financieros tradicionalmente estables.
Hacia las 7:00 am del mismo día, aunque el ritmo de ascenso disminuyó ligeramente, el oro seguía mostrando un sólido desempeño al situarse en torno a los 3.208,73 dólares. Desde comienzos de año, esta tendencia alcista ha resultado particularmente notable, registrándose un aumento acumulado superior al 21%. Este comportamiento positivo confirma cómo el oro se ha consolidado como uno de los activos preferidos durante períodos de inestabilidad.
Desde principios de enero, el oro ha ganado terreno de manera consistente, destacándose especialmente en el primer trimestre del año. Este período cerró con un desempeño excepcional, siendo el mejor inicio de año desde 1974. Los analistas atribuyen este éxito a la búsqueda constante de seguridad por parte de inversores ante un panorama económico lleno de incertidumbres.