En un año lleno de éxitos, el boxeo español cerró 2024 con un desempeño sobresaliente que augura un futuro prometedor para 2025. Con tres campeonatos europeos, tres platas y dos intentos mundiales, la disciplina nacional ha demostrado su fortaleza. Los nombres destacados son Sandor Martín y Jennifer Miranda, quienes se perfilan como las grandes esperanzas del país en la búsqueda de títulos internacionales. Además, otros púgiles como Cristóbal Lorente, Samuel Molina y Tania Álvarez han reforzado la presencia española en el panorama europeo.
En medio de un otoño dorado, Sandor Martín se prepara para enfrentarse al dominicano Alberto Puello en una pelea por el título mundial superligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB). Según las últimas decisiones del organismo, el combate está programado para el 1 de marzo en Nueva York, posiblemente en el icónico Madison Square Garden. Aunque la promotora Premier Boxing Champions aún no ha confirmado oficialmente el evento, todo indica que el catalán volverá a este escenario emblemático donde ya protagonizó un encuentro memorable contra Teofimo López.
Por su parte, la andaluza Jennifer Miranda, quien obtuvo el título interino del peso pluma de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) en octubre de 2023, aspira ahora a enfrentarse a Amanda Serrano, una de las mejores boxeadoras de todos los tiempos. Si bien no hay fecha oficial, Miranda se posiciona como la próxima contendiente natural para disputar el cinturón absoluto.
Desde diferentes rincones del país, varios boxeadores españoles están listos para hacer historia. Cristóbal Lorente, el flamante campeón europeo del peso pluma, se prepara para su segunda defensa contra el británico Nathaniel Collins, mientras que Samuel Molina defenderá su título EBU welter en Málaga frente al francés Sandy Messaoud. Otros talentos emergentes, como Salvador Jiménez, Óscar Díaz y Tania Álvarez, también buscan consolidar sus triunfos en Europa y apuntan a nuevos retos internacionales.
La temporada 2025 promete ser emocionante, con numerosos duelos nacionales e internacionales que pondrán a prueba la resistencia y habilidad de los púgiles españoles. La lucha por mantener y ampliar el dominio en Europa, junto con los intentos de conquistar títulos mundiales, convertirá a este año en uno de los más recordados en la historia del boxeo español.
Desde la perspectiva de un periodista, es evidente que el boxeo español está viviendo un renacimiento sin precedentes. El éxito obtenido en competiciones europeas y la proximidad de oportunidades mundiales sugieren que el país está en camino de convertirse en una potencia global en esta disciplina. Los jóvenes talentos, respaldados por entrenadores experimentados y una sólida estructura de desarrollo, están listos para llevar las banderas de España a lo más alto del podio internacional. Este momento histórico no solo inspira a los aficionados, sino que también abre nuevas puertas para futuras generaciones de boxeadores.