Médicos del SAMU Denuncian Problemas en la Coordinación de Emergencias en Alicante
Los médicos adscritos a las 17 ambulancias SAMU que cubren las emergencias en la provincia de Alicante han expresado su rechazo a los protocolos que se están aplicando desde el Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) para decidir qué tipo de vehículo acude a cada servicio. Consideran que este sistema de trabajo no es el adecuado y que puede tener consecuencias negativas para la atención de los pacientes.Médicos del SAMU Denuncian Problemas en la Coordinación de Emergencias en Alicante
Desacuerdo con los Protocolos del CICU
Los profesionales médicos del SAMU en Alicante han manifestado su desacuerdo con los protocolos que se están aplicando desde el CICU para determinar qué tipo de vehículo acude a cada emergencia. Según explican, en ocasiones se envía una unidad SAMU (ambulancia con médico) a atender urgencias que, a su juicio, no lo son, cuando podrían ser atendidas por unidades de Soporte Vital Avanzado de Enfermería (SVAE) o Soporte Vital Básico (SVB). Esto, advierten, puede retrasar la respuesta a emergencias reales que pongan en riesgo la vida de los pacientes.Los médicos del SAMU consideran que su labor es "tiempo-dependiente", es decir, que llegar unos segundos antes o después puede ser vital para salvar vidas. Por ello, consideran que el actual sistema de coordinación, en el que a menudo son enviados a atender casos que no requieren su presencia, puede tener consecuencias graves.Centralización del Servicio de Emergencias
El malestar de los profesionales se debe también al proceso de centralización del servicio de emergencias llevado a cabo por la Generalitat Valenciana. A principios de 2023, las instalaciones del CICU en Alicante fueron trasladadas a Valencia, al igual que ocurrió con las de Castellón.Esta decisión, que fue criticada tanto por sindicatos como por los propios profesionales, ha generado problemas de coordinación y, según denuncian, "una pérdida de rendimiento de estas unidades y, sobre todo, un peor tiempo de respuesta".Falta de Comunicación y Toma de Decisiones
Los médicos del SAMU aseguran que en la actualidad no pueden discrepar de las decisiones tomadas por el CICU, ya que no tienen acceso directo a los coordinadores del servicio. Las decisiones sobre qué tipo de unidad debe acudir a cada emergencia son tomadas, en muchos casos, por enfermeros adscritos al CICU, quienes simplemente aplican los protocolos establecidos sin entrar a valorar más allá.Esto ha llevado a situaciones en las que se envían unidades SAMU a atender casos que, a juicio de los médicos, no deberían requerir su presencia, como traslados de pacientes por no tomar la medicación o atención de alcoholemias. Estos servicios, consideran, deberían ser atendidos por unidades de menor nivel, evitando así que las unidades SAMU, con personal médico, queden desplazadas y no puedan acudir a emergencias reales.Respuesta del Director del SESCV
El director del Servicio de Emergencias Sanitarias de la Comunidad Valenciana (SESCV), Rafael Romero, ha reconocido que se ha producido un aumento de llamadas de médicos del SAMU al CICU cuestionando la asignación de recursos. Sin embargo, Romero considera que las decisiones tomadas desde el CICU se basan en una "visión de conjunto" de la situación, con información recabada de diversas fuentes, que los médicos del SAMU podrían desconocer.Romero ha recordado a los profesionales que el CICU es "la autoridad competente" para determinar los recursos adecuados en cada momento, y se ha mostrado contrario a que los médicos cuestionen estas decisiones, ya que, en su opinión, esto podría "complicar la gestión" del servicio de emergencias.Llamadas de Emergencia en Alicante
Según los datos del CICU, en 2023 se atendieron un total de 249.313 llamadas de emergencia en la provincia de Alicante, lo que supone una media de 683 llamadas diarias. De estas, 252 se atendieron como emergencias sanitarias, 143 como transporte urgente no atendido y 106 como urgencias sanitarias.Los médicos del SAMU y el Sindicato Médico consideran que el problema radica en la centralización del servicio y el cambio de procedimiento, lo que ha generado problemas de coordinación y, a su juicio, una pérdida de eficacia en la atención de emergencias en la provincia de Alicante.