En el año 2024, la industria automotriz de India experimentó un crecimiento moderado en las ventas de vehículos a concesionarios, alcanzando un incremento del 4,2%, el más bajo en cuatro años. A pesar de que se registraron récords en las ventas totales de vehículos de pasajeros, que incluyen desde coches pequeños hasta SUVs, la demanda se vio afectada por factores económicos como la inflación elevada. Los datos proporcionados por la Sociedad de Fabricantes Indios de Automóviles muestran una variación significativa entre los diferentes segmentos del mercado, con algunas categorías experimentando declives mientras otras mostraban un aumento.
El panorama económico durante 2024 tuvo un impacto notable en el sector automotriz indio. Las ventas totales de vehículos de pasajeros aumentaron ligeramente, alcanzando los 4,27 millones de unidades vendidas en todo el año, frente a los 4,11 millones de 2023. Sin embargo, este crecimiento fue desigual entre los diferentes tipos de vehículos. Los coches pequeños, que representan aproximadamente un tercio del mercado total, sufrieron una caída del 14,4% en sus ventas debido a precios que superaban los ingresos de sus clientes potenciales. En contraste, los vehículos grandes y los SUVs experimentaron un aumento del 16,8%, aunque este crecimiento fue menor en comparación con el 22% registrado en 2023.
La situación económica complicada llevó a los fabricantes y concesionarios a ofrecer descuentos más generosos en la segunda mitad del año para incentivar las compras. La alta inflación afectó directamente la capacidad adquisitiva de los consumidores, especialmente en lo que respecta a los vehículos más económicos. Este fenómeno puso de manifiesto la sensibilidad del mercado ante las condiciones económicas globales y locales.
A pesar de los desafíos enfrentados en 2024, los analistas anticipan un cambio positivo en el horizonte. Se espera que en 2025, el lanzamiento de nuevos modelos y la posible reducción de las tasas de interés impulsen nuevamente la demanda de automóviles en India. Estos factores podrían revitalizar el sector, permitiendo un crecimiento más robusto y equilibrado entre los diferentes segmentos del mercado. Los fabricantes están preparándose para aprovechar estas oportunidades con estrategias innovadoras y productos que respondan mejor a las necesidades cambiantes de los consumidores.