Breve Avance en Igualdad de Género en Puestos Directivos

Apr 8, 2025 at 12:32 PM
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Un estudio realizado por ICSA Grupo y EADA Business School ha revelado un preocupante retroceso en la igualdad salarial entre hombres y mujeres en puestos directivos en España. Aunque se han logrado avances significativos en los últimos años, la brecha salarial vuelve a aumentar, con diferencias notorias especialmente en roles de alta dirección. El informe también destaca que la proporción de mujeres en estos cargos sigue siendo insuficiente, lo que refleja desafíos persistentes en términos de equidad laboral.

El análisis indica que el sueldo promedio para un directivo masculino alcanza los 95.541 euros anuales, mientras que las mujeres ocupando posiciones similares perciben un promedio de 84.647 euros al año, marcando una diferencia del 12,9%. Este aumento en la brecha respecto al 2024, cuando era del 11,2%, subraya la necesidad de políticas más efectivas para abordar este problema. Según las expertas, factores como la segregación ocupacional y la penalización por flexibilidad horaria son responsables de esta situación.

En el ámbito de la alta dirección, solo el 16,9% de los cargos están ocupados por mujeres, aunque este número representa un leve incremento frente a estudios previos. Sin embargo, sectores tradicionalmente dominados por hombres, como producción y tecnología, siguen mostrando cifras alarmantes, con apenas un 5,8% y un 5,1% respectivamente de representación femenina. En contraste, áreas como recursos humanos o comunicación presentan mayor presencia femenina.

Las investigadoras destacan cómo estructuras laborales obsoletas continúan perpetuando estas disparidades. Muchas mujeres optan por aceptar menores salarios a cambio de horarios más flexibles, ya que las empresas no valoran adecuadamente la conciliación. Además, movimientos reaccionarios en política internacional podrían comprometer aún más el progreso hacia la igualdad.

Es fundamental adoptar medidas transformadoras que fomenten la corresponsabilidad tanto en el hogar como en el entorno laboral. Solo así será posible cerrar definitivamente la brecha salarial y garantizar una verdadera igualdad de oportunidades en todos los niveles jerárquicos. La mejora paulatina en algunos indicadores sugiere que es posible avanzar, pero queda mucho camino por recorrer.