El boxeador mexicano Saúl "Canelo" Álvarez logró un triunfo contundente en Arabia Saudí, consolidándose como campeón indiscutido en la división supermedio. Su enfrentamiento contra William Scull terminó con una victoria por decisión unánime, destacando la habilidad técnica del tapatío frente a un rival competitivo pero insuficiente. Este evento marcó también el inicio de una nueva era para el boxeo global, al reunir a las principales organizaciones bajo un mismo techo. Además, tras el combate, se anunció oficialmente el próximo desafío de Canelo contra Terence Crawford, uno de los mejores libra por libra del mundo.
Desde el inicio del combate, Álvarez demostró su superioridad estratégica al presionar constantemente a Scull y obligarlo a retroceder. Con golpes precisos al cuerpo y combinaciones efectivas, el mexicano dictó el ritmo de la pelea. Aunque el cubano mostró resistencia notable y movimientos ágiles durante algunos asaltos, no pudo contrarrestar la constante agresividad del campeón.
A medida que avanzaron los rounds, el cansancio empezó a hacerse evidente en el desempeño de Scull, quien cada vez encontraba más dificultades para esquivar los ataques de Álvarez. En particular, el noveno round dejó ver un momento crucial cuando el tapatío conectó un fuerte gancho al hígado, debilitando considerablemente a su oponente. Sin embargo, pese a estos avances, el enfrentamiento careció de espectacularidad completa debido a la falta de variedad en los golpes ejecutados por ambos boxeadores.
Con este resultado, Turki Al-Sheikh, promotor del evento, dio luz verde al siguiente capítulo: un duelo entre Canelo y Terence Crawford, programado para septiembre en Las Vegas. Ambos atletas compartieron un instante cargado de tensión en el ring, anticipando un choque histórico que podría redefinir el panorama del boxeo moderno.
El desempeño de Canelo en Arabia Saudí no solo confirmó su dominio absoluto en la categoría supermedio, sino que también abrió las puertas hacia un futuro emocionante donde sus habilidades serán puestas a prueba contra uno de los rivales más temidos de la actualidad. Este nuevo enfrentamiento promete ser mucho más intenso y determinará si Álvarez puede mantener su posición como uno de los grandes referentes del deporte.