Un Día Histórico para el Baloncesto de Bilbao

Apr 25, 2025 at 6:27 PM
Slide 3
Slide 1
Slide 2
Slide 3
Slide 1

La ciudad de Bilbao vibró con la celebración del primer título continental en su historia. Desde tempranas horas, los aficionados comenzaron a reunirse bajo un cielo que cambió de tonalidades, pasando de soleado a nublado y finalmente regalando algunas gotas de lluvia. La multitud, estimada en diez mil personas, llenó las calles para rendir homenaje al equipo campeón. Este evento marcó una transformación significativa desde aquellos tiempos difíciles de 2014, cuando medio millar de seguidores desfilaron por el centro de la ciudad en busca de apoyo para una entidad en crisis. Once años después, esa misma ruta fue recorrida en sentido contrario, pero ahora para festejar un logro inédito.

El corazón de Bilbao se movilizó para recibir a sus héroes. A diferencia de otros eventos deportivos donde el río sirve como escenario común, esta vez todo ocurrió sobre el asfalto, siguiendo las tradiciones propias del baloncesto. Con puntualidad impecable, la plantilla llegó en un autobús turístico decorado con una camiseta especial que portaba la palabra Txamps. La presidenta Isabel Iturbe, acompañada por el entrenador Jaume Ponsarnau y el capitán Xavi Rabaseda, levantaron orgullosos el trofeo al llegar al Ayuntamiento, donde fueron recibidos por el alcalde Juan Mari Aburto. Las palabras de ánimo resonaron en cada esquina mientras los cánticos, como "¡Que bote Miribilla!", llenaban el ambiente de alegría colectiva.

Este triunfo no solo representa un hito deportivo, sino también un ejemplo de perseverancia y trabajo en equipo. El alcalde destacó cómo este grupo ha llevado los valores y el espíritu de Bilbao a cada cancha europea. En respuesta, Ponsarnau expresó su gratitud hacia los jugadores, describiéndolos como una manada supercoordinada capaz de resucitar incluso a quienes parecían perdidos. Mientras tanto, Rabaseda, quien vivió recientemente una experiencia personal desafiante con una meningitis, aseguró que este título ocupará un lugar especial en su corazón. La ambición ya mira más allá; el director deportivo Rafa Pueyo habla de continuar este ciclo exitoso y aspirar a competencias aún mayores, como la Champions League. Este día quedará grabado en la memoria colectiva de Bilbao como un brindis eterno hacia el futuro.