Disfruta de 4 lomos de atún fresco, cada uno pesando 150 gramos. Estos lomos brindan un sabor intenso y fresco. Junta 1/2 taza de semillas de ajonjolí blanco y negro mezcladas, que añaden un toque especial a la mezcla. Si lo deseas, puedes agregar 1/4 taza de pimienta rosa triturada para un toque más picante. Utiliza 2 cucharadas de aceite de oliva para untar y darle un sabor suave. Añade sal y pimienta al gusto para adaptar el sabor a tus preferencias.
Este plato combina los sabores del atún y las semillas de manera perfecta. Las semillas brindan un crujiente y novedoso toque, mientras que el atún brilla con su sabor fresco. Es un plato que cautiva el paladar y deja un sabor inolvidable.
Prepara 2 tazas de sandía sin semillas, cortada en cubos pequeños. Agrega 1/4 taza de jugo de limón para darle un toque ácido. Incorpora 1 chile serrano o jalapeño en rodajas finas para un poco de picante. Añade 1/4 taza de cilantro fresco para un aroma fresco y herboso. Puedes también agregar 1/4 taza de pepino pelado y en cubos para una textura fresca. Incorpora 2 cucharadas de cebolla morada picada finamente para un toque saboroso. Si lo deseas, puedes agregar 1 cucharada de salsa de soya para un sabor más intenso.
Este aguachile de sandía es una explosión de sabores. La sandía brinda un sabor fresco y dulce, mientras que el chile y el cilantro añaden un toque picante y herboso. Es un plato fresco y delicioso que se adapta perfectamente al clima caluroso.
Utiliza rodajas finas de rábanos para dar un toque de color y textura. Agrega hojas de cilantro fresco para un toque herboso. Puedes también espolvorear un poco de aceite de oliva extra virgen para dar un toque de suavidad.
La decoración agrega un toque final de elegancia a los platos. Las rodajas de rábanos brindan un color vibrante, mientras que las hojas de cilantro añaden un aroma fresco. El aceite de oliva extra virgen une todo y da un toque de suavidad al plato.