Comenzamos picando finamente las gambas y el pescado. Puedes utilizar cualquier pescado blanco, como el merluza, que es muy común. Si tienes una picadora, es mucho más fácil. Luego, cortamos finamente el puerro y lo rehogamos en una cacerola con aceite de oliva a fuego medio. Cuando el puerro esté pochado, lo retiramos y añadimos las gambas y el merluza. Subimos el fuego para que se cocinen y solten agua. Finalmente, agregamos los mejillones escurridos del escabeche y bien picados, junto con una cucharadita de harina. Rehogamos todo y añadimos un poco de leche para que el relleno esté cremoso. Rectificamos de sal, pimienta y guardamos en un manga pastelera.
Este relleno es el secreto de nuestros canelones de marisco. Cada bocado es una explosión de sabores y texturas, que harán que los paladares se despierten.
En un cazo, ponemos a derretir la mantequilla. Luego, agregamos la harina tamizada para evitar grumos y dejamos que se cocine unos minutos. A continuación, añadimos poco a poco la leche hasta que obtenemos una textura media de bechamel, ni muy líquida ni demasiado espesa. Cocinamos durante 20 minutos, rectificamos de sal y la reservamos.
La bechamel es la base que une todos los sabores del canelón. Brinda un toque cremoso y suave que complementa perfectamente el relleno de marisco.
Este tipo de pasta se cocina en el horno, por lo que solo tenemos que rellenarlo. Con la ayuda de una manga pastelera, rellenamos uno a uno los canelones. Ponemos una base de bechamel en una bandeja de horno y encima todos los canelones rellenados. Cubrimos con más bechamel y horneamos durante 30 minutos a 190º. Minutos antes, activamos el grill para gratinar los canelones y darles un toque dorado.
Ver cómo los canelones se vuelven dorados y crujientes en el horno es una experiencia maravillosa. Cuando salen del horno, son un verdadero espectáculo visual y gustativo.
Estamos en plena temporada de pensar en platos para Navidad y estos canelones de marisco son perfectos. También puedes combinarlos con otras recetas tradicionales, como guisos o un asado. Otra opción es servirlos como plato principal o como parte de un buffet. La flexibilidad de estos canelones permite que se adapten a cualquier ocasión navideña.
Experimenta con diferentes combinaciones y déjate inspirar por la creatividad culinaria. Estos canelones de marisco son una joya en la cocina navideña.