Conforme se acerca la etapa final de la vida laboral, muchos trabajadores empiezan a calcular el monto que recibirán tras dejar de trabajar. En el año 2025, las normativas establecen una edad mínima de jubilación de 65 años para quienes hayan cotizado durante un mínimo de 38 años y tres meses. Sin embargo, aquellos con menor tiempo de cotización deberán esperar hasta los 66 años y ocho meses. Para acceder a la jubilación ordinaria, es necesario haber contribuido al sistema por lo menos 15 años, aunque esto no garantiza el 100% de la pensión.

Detalles sobre las Pensiones en el Año 2025

En este contexto, las condiciones para obtener pensiones varían según el tiempo de cotización. En el horizonte del año 2025, para alcanzar el 100% de la base reguladora, es indispensable contar con una cotización de 36 años y medio. Si el período de trabajo es menor, las pensiones disminuyen progresivamente. Por ejemplo, quienes hayan cotizado solamente 15 años recibirán un 50% de la base reguladora, mientras que aquellos con 20 años obtienen un 62,38%. Quienes cuenten con 30 años de cotización percibirán aproximadamente un 85,18%.

Un análisis más detallado revela cómo esta fórmula impacta en las cifras reales. Un trabajador con una base reguladora de 1.200 euros mensuales y 20 años de cotización recibiría 748,56 euros. Este monto aumenta conforme crece la base reguladora: desde 810,94 euros para una base de 1.300 euros hasta 1.247,60 euros para quienes tengan una base reguladora de 2.000 euros.

Es importante notar que estas cifras dependen tanto del tiempo de cotización como del salario promedio registrado durante los mejores años laborales.

Desde una perspectiva periodística, este análisis resalta la importancia de planificar financieramente la jubilación. Los trabajadores deben ser conscientes de que sus ingresos futuros dependerán directamente de cuánto tiempo contribuyeron al sistema y cuál fue su remuneración media. Esta información debería motivar a las personas a maximizar su tiempo de cotización y buscar alternativas de inversión complementarias para asegurar una vejez tranquila y digna.