La capital española fue testigo este domingo de una movilización ciudadana que demanda medidas efectivas frente a la crisis habitacional. Numerosos grupos sociales se unieron para expresar su descontento con la escalada de precios y el aumento de desalojos, situaciones que han llevado a muchas familias a enfrentarse a dificultades insostenibles. La marcha, organizada bajo el lema "Vivienda digna y sostenible ¡Ya!", reúne colectivos que ven en la vivienda un derecho fundamental.

Los organizadores destacan que esta protesta surge como respuesta a la falta de acción por parte de las autoridades, quienes, según ellos, no han abordado adecuadamente la emergencia habitacional. En los últimos meses, los costos de las propiedades han experimentado un alza significativa, alcanzando niveles récord y superando incluso los máximos históricos previos. Esta situación ha generado una disparidad entre oferta y demanda, lo que ha llevado a prácticas especulativas que excluyen a muchos ciudadanos del mercado inmobiliario. Los convocantes critican duramente políticas como la Ley Ómnibus y el Plan Vive, considerándolas favorables a intereses económicos privados en detrimento del bienestar público.

Ante este escenario, los manifestantes proponen soluciones que incluyen la expansión del parque de viviendas públicas, la regularización del alquiler turístico ilegal y la implementación de controles sobre los precios del alquiler. Estas medidas buscan garantizar el acceso a una vivienda digna y sostenible para todos los ciudadanos, subrayando la importancia de que las administraciones prioricen el bienestar social sobre los beneficios económicos particulares. La movilización refleja un llamado a la responsabilidad y la justicia social, elementos esenciales para construir una sociedad más equitativa y humana.