En el marco de las celebraciones de Semana Santa, la rosca de Pascua emerge como un símbolo gastronómico que une generaciones. Este dulce tradicional, conocido por su sabor único y decoración festiva, ha evolucionado con el tiempo para adaptarse a diferentes gustos y estilos de vida. Desde versiones clásicas repletas de cerezas y higos hasta opciones gourmet con almendra o incluso alternativas saludables sin gluten, cada panadero imprime su toque personal en esta receta centenaria. Además, los expertos recomiendan técnicas específicas para preservar su frescura y disfrutarla al máximo durante las fiestas.
A lo largo de los años, la rosca de Pascua ha mantenido una conexión especial con la tradición familiar. En sus inicios, destacaba por detalles únicos como los huevos coloreados en su masa, aunque hoy día estas costumbres han sido sustituidas por decoraciones más actuales. Juliana Herrera Dappe, de Madda Patisserie, recalca la importancia de consumir este postre en los días posteriores a su horneado para garantizar su textura ideal. La clave está en mantenerla a temperatura ambiente, ya que refrigerarla podría alterar su calidad.
Para quienes prefieren sabores más sofisticados, Camila Peréz, chef de La Tornería de Camila, sugiere utilizar coberturas innovadoras como crema pastelera con licor de naranja o incluso dulce de leche. Su consejo es no escatimar en rellenos, pues esto asegura que la masa permanezca jugosa incluso después del primer día. Otro detalle crucial es ajustar perfectamente el tiempo de cocción, dado que la humedad natural de la mezcla puede volverse seca si se sobrecocina.
Morgan Chauvel, maestro panadero de Cocu Boulangerie, propone una versión europea basada en la masa brioche, rica en manteca y yemas de huevo. Según él, el secreto radica en emplear ingredientes frescos y de alta calidad, como vainilla natural y almendras fileteadas. Aunque esta variante tiene un costo mayor, ofrece una experiencia indulgente que vale la pena explorar.
No obstante, aquellos interesados en opciones más saludables pueden optar por recetas libres de harinas refinadas y azúcar blanco, utilizando en su lugar ingredientes naturales como harina integral y leche vegetal. Romina Salina incluso presenta una versión sin TACC, ideal para incluir a todos los miembros de la familia en esta celebración culinaria.
Cuando llegue el domingo de Pascuas, independientemente de la elección hecha, la preparación de esta rosca será una actividad que fortalecerá los lazos familiares. Ya sea siguiendo métodos tradicionales o experimentando con ingredientes modernos, lo importante es disfrutar juntos de un momento lleno de sabor y afecto.