El líder municipal de Vigo, Abel Caballero, ha convocado una conferencia de prensa para abordar las revelaciones sobre manipulaciones en la selección de sedes para el Mundial de Fútbol 2030. Denunciando lo que considera "una gravedad extrema", el alcalde demandó explicaciones al presidente de la RFEF, Rafael Louzán, por la exclusión repentina de Vigo como sede oficial. Este desarrollo surge tras correos electrónicos y grabaciones que sugieren decisiones poco transparentes dentro del proceso.

La situación se volvió más tensa cuando salió a la luz un correo enviado por María Tato, jefa de la candidatura, asegurando que la participación de Vigo estaba garantizada con apoyo gubernamental. Sin embargo, apenas 48 horas después de este mensaje, la ciudad fue eliminada de la lista final sin previo aviso ni justificación pública clara. Este cambio abrupto ha generado preocupación no solo local, sino también internacional, dado el impacto mediático que tiene el torneo mundial.

En una declaración contundente, Caballero enfatizó que la integridad de la marca España está siendo comprometida debido a estos eventos. Citando fragmentos de conversaciones filtradas donde se mencionan ajustes repetitivos en los valores hasta obtener resultados favorables, el alcalde señaló cómo estas acciones podrían dañar la reputación global del país. “Estamos hablando de algo que es seguido por millones de personas alrededor del mundo”, recalcó durante su intervención.

Además, el alcalde expresó la indignación generalizada entre los habitantes de Vigo ante esta decisión. Criticó duramente la falta de transparencia mostrada por parte de la RFEF y reiteró que Louzán debe responder urgentemente acerca de quién tomó tal determinación y bajo qué criterios. Según Caballero, esto va más allá de una simple omisión administrativa; representa un problema ético significativo que afecta tanto al deporte como al prestigio nacional.

Finalmente, queda evidente que la controversia rodeando la exclusión de Vigo ha generado serias preguntas sobre la integridad del proceso de selección de sedes para el Mundial 2030. La presión sigue aumentando sobre Rafael Louzán y la RFEF para proporcionar respuestas claras y satisfactorias que puedan restaurar la confianza pública y evitar mayores repercusiones negativas tanto para la ciudad como para el país anfitrión potencial.