Un hito en la conexión entre moda y patrimonio cultural se celebra con el regreso de Gucci a Florencia. En esta ocasión, la prestigiosa marca italiana ha elegido un emplazamiento emblemático para su próximo desfile Cruise 2026: el Palazzo Settimanni, ubicado en el corazón artesanal de la ciudad. Este edificio no solo representa una estructura arquitectónica, sino que es un testimonio vivo del ADN de Gucci. Desde su adquisición en 1953, este lugar ha sido testigo de múltiples transformaciones, desde talleres hasta showrooms, consolidándose ahora como custodio oficial del archivo histórico de la firma.

Este retorno a Florencia tiene un significado profundo más allá de lo estético. Fundada en 1921 por Guccio Gucci, la marca siempre ha estado intrínsecamente ligada a esta ciudad, cuya esencia creativa y artesanal ha moldeado su identidad global. Hoy en día, Florencia alberga varios epicentros de la actividad de Gucci, como el Palazzo Gucci, la Gucci Osteria y el ArtLab. Además, la firma va más allá del ámbito comercial, invirtiendo en iniciativas culturales locales, como la restauración del Parco delle Cascine y su colaboración con el festival Estate Fiorentina de 2026, reforzando así su compromiso con el tejido cultural de la región.

La presentación del desfile Cruise 2026 en el Palazzo Settimanni simboliza un puente entre tradición e innovación. Según Stefano Cantino, CEO de Gucci, este evento no solo honra el pasado de la marca, sino que también proyecta sus raíces hacia el futuro. Para la alcaldesa Sara Funaro, esta iniciativa refleja el orgullo compartido entre Gucci y Florencia, destacando cómo la moda se convierte en un medio para celebrar la autenticidad cultural. Más que un simple espectáculo, este desfile es una invitación a explorar cómo la herencia artesanal italiana puede inspirar nuevas generaciones de creadores internacionales, posicionando a Florencia como un crisol único donde historia y vanguardia coexisten armónicamente.