La psicóloga especializada en terapia emocional, Isabel Rojas Estapé, ha lanzado un libro innovador titulado 'Me baila el corazón'. A través de la historia de Cris y su neurona imaginaria, Neurita, este cuento ayuda a los niños a comprender y gestionar sus emociones. El libro surge de la necesidad de los padres para enseñar a sus hijos cómo manejar sentimientos complejos como la tristeza, la frustración o el miedo. Además, profundiza en la importancia de vivir el presente y fomentar recuerdos positivos que puedan ser utilizados en momentos difíciles.
Este apartado explora cómo los padres pueden ayudar a sus hijos a entender y gestionar sus emociones. A través del personaje de Neurita, los niños aprenden a identificar y verbalizar lo que sienten, reduciendo así la intensidad de emociones negativas. Este enfoque permite a los pequeños enfrentarse a situaciones desafiantes con mayor facilidad y confianza.
Los padres juegan un papel crucial en este proceso. Al introducir a sus hijos al concepto de Neurita desde una edad temprana, pueden facilitar conversaciones sobre emociones que de otro modo podrían ser difíciles de abordar. La autora sugiere que incluso niños pequeños pueden beneficiarse de estas discusiones, ya que comienzan a desarrollar un lenguaje emocional que les permitirá expresarse mejor. En lugar de simplemente reaccionar ante emociones fuertes, los niños aprenden a reflexionar sobre lo que sienten y por qué lo sienten, lo cual es fundamental para su desarrollo emocional.
El libro también enfatiza la importancia de crear y recordar momentos felices. Al hacer esto, los niños pueden acceder a estos recuerdos durante tiempos difíciles, proporcionándoles una herramienta valiosa para mantenerse optimistas. Además, esta práctica ayuda a los pequeños a valorar más plenamente las experiencias cotidianas, fortaleciendo su capacidad para vivir el presente.
Rojas Estapé destaca que la memoria emocional es poderosa y selectiva, recordando principalmente aquello que nos hace sentir. Por ello, invita a los padres a detenerse y destacar detalles positivos en actividades diarias, permitiendo que estos momentos se impriman más profundamente en la mente de los niños. Este enfoque no solo mejora el bienestar emocional sino que también contribuye a desarrollar una resiliencia más sólida frente a adversidades futuras. Además, el libro ofrece guías prácticas para padres, proporcionando estrategias específicas para manejar tanto momentos buenos como malos, asegurando que los niños crezcan con una comprensión saludable de sus emociones y cómo manejarlas.