El Impacto de los Cambios Climáticos en la Salud Humana

Mar 31, 2025 at 9:12 AM

En un período donde las condiciones climáticas han sido más inestables que nunca, muchas personas han comenzado a experimentar efectos físicos y emocionales provocados por estas fluctuaciones. Este fenómeno, conocido como meteorosensibilidad, afecta entre un 30% y un 60% de la población, siendo especialmente notable en mujeres y adultos mayores. Los cambios en la presión atmosférica, temperatura, humedad o incluso la luz solar pueden desencadenar dolencias físicas y alteraciones emocionales.

Detalles sobre el Fenómeno de Meteorosensibilidad

Este mes de marzo ha sido testigo de una serie de tormentas atlánticas que han barrido la Península Ibérica, trayendo consigo viento, lluvias intensas y cielos nublados. En este contexto, muchos individuos han reportado síntomas asociados con la meteorosensibilidad, un término acuñado para describir cómo ciertos seres humanos reaccionan ante variaciones climáticas significativas.

Según Mar Gómez, destacada meteoróloga y autora del libro "Meteorosensibles", esta interacción entre el ser humano y su entorno atmosférico es inevitable. “Los cambios en las variables meteorológicas afectan directamente a nuestro cuerpo y mente”, explica Gómez. En particular, las personas vulnerables pueden sufrir desde dolores de cabeza hasta episodios depresivos, especialmente durante transiciones estacionales o cuando las temperaturas se elevan repentinamente.

Por ejemplo, en épocas cálidas, algunos pueden enfrentarse a fatiga, golpes de calor o problemas cardíacos. En contraste, durante los meses más fríos y oscuros, la falta de luz diurna puede inducir trastornos emocionales como la depresión estacional.

Inspiración y Reflexión

Desde una perspectiva periodística, este fenómeno subraya la importancia de comprender nuestra conexión con el entorno natural. Reconocer la meteorosensibilidad no solo ayuda a diagnosticar posibles malestares, sino que también nos invita a cuidar mejor tanto nuestra salud como nuestro planeta. Aprender a adaptarnos a estos cambios climáticos podría marcar una diferencia significativa en nuestra calidad de vida diaria.