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El entrenador del equipo de baloncesto del Real Madrid, Chus Mateo, declaró que su grupo se encuentra mentalmente preparado para enfrentar desafíos importantes tras el triunfo en la fase previa contra el Bayern Múnich. A pesar de reconocer la fortaleza del Olympiacos, señaló que el Real Madrid tiene la capacidad de luchar hasta el final y competir por los más altos honores. Además, destacó la importancia de la mentalidad ganadora y el estilo de juego colectivo que ha desarrollado el equipo.

Un Equipo Listo para la Lucha Final

Más allá de las dificultades anticipadas, Chus Mateo enfatizó la determinación del equipo para alcanzar metas elevadas. Aunque el calendario esté cargado y las circunstancias sean duras, subrayó la recuperación emocional tras el partido frente al Bayern Múnich, así como la disposición de sus jugadores para afrontar retos mayores. Este espíritu es clave para avanzar en la competencia.

El técnico expresó que, aunque muchos puedan percibir signos de agotamiento, su plantel está decidido a demostrar lo contrario. Según Mateo, la victoria ante el Bayern no solo consolidó su pase, sino que también reforzó la confianza grupal. Esta actitud positiva será crucial en el enfrentamiento con Olympiacos, un rival conocido por su consistencia y ventaja local. Sin embargo, el Real Madrid cuenta con una larga tradición de superar adversidades, lo cual les da una sólida base para creer en sus posibilidades.

La Fuerza del Juego Colectivo

Además de mencionar la importancia de la mentalidad competitiva, Mateo resaltó el estilo de juego del equipo. En particular, valoró cómo el colectivo prioriza decisiones estratégicas sobre actuaciones individuales, destacando aspectos fundamentales del éxito reciente en ataque.

En su análisis posterior al partido frente al Bayern, Mateo hizo hincapié en la calidad ofensiva mostrada, pero no tanto en los números como en la forma de generar oportunidades. Explicó que el auténtico mérito radica en cómo los jugadores optaron por repartir balones y elegir siempre al compañero mejor posicionado, promoviendo un ambiente de trabajo en equipo. Este enfoque altruista demuestra que el conjunto blanco no solo busca anotar puntos, sino construir una dinámica sólida basada en la colaboración mutua. Tal filosofía podría ser decisiva en futuros compromisos, especialmente cuando enfrente rivales tan experimentados como Olympiacos.