



Este fin de semana, el baloncesto universitario femenino se robará los titulares con una emocionante final entre South Carolina y Connecticut. En las semifinales celebradas este viernes, las Gamecocks de South Carolina demostraron su superioridad al vencer a Texas por un marcador de 74-57, mientras que las Huskies de Connecticut aplastaron a UCLA con un resultado abrumador de 85-51. Este enfrentamiento histórico tendrá lugar el domingo en el Amalie Arena de Tampa, Florida, donde ambas escuadras buscarán consolidar su legado en el deporte.
En el primer enfrentamiento de semifinales, South Carolina logró cumplir con las expectativas al derrotar a Texas con un desempeño destacado. La clave del éxito estuvo en manos de jugadores como Te-Hina Paopao, quien anotó 14 puntos, seguida por Joyce Edwards con 13 y Bree Hall con 11. Aunque Texas comenzó fuerte liderando el primer cuarto, no pudieron mantener el ritmo frente a la poderosa estrategia de las Gamecocks. Por parte de Texas, Jordan Lee lideró el ataque con 16 puntos, mientras que Madison Booker contribuyó con otros 14.
Por otro lado, Connecticut mostró un dominio absoluto sobre UCLA en la segunda semifinal. Con un rendimiento excepcional, Sarah Strong lideró el equipo con 22 puntos, apoyada por Azzi Fudd con 19 y Paige Bueckers con 16. Sin embargo, Lauren Betts fue la figura más destacada de UCLA, acumulando nada menos que 26 puntos, aunque esto no fue suficiente para igualar el ímpetu de las Huskies. El marcador final de 85-51 dejó claro quién controlaba el juego desde el inicio.
Este enfrentamiento marca un momento crucial en la historia del baloncesto universitario femenino, ya que South Carolina, dirigida por la icónica entrenadora Dawn Staley, ha ganado tres campeonatos en los últimos años (2017, 2022 y 2024). Mientras tanto, Connecticut sigue siendo una fuerza imparable con once títulos de la NCAA bajo su cinturón, el último obtenido en 2016. Ambos equipos ya han chocado antes en la final de 2022, cuando South Carolina salió victoriosa con un marcador de 64-49.
Con dos equipos tan exitosos enfrentándose en la gran final, la anticipación es palpable. Este domingo promete ser un día memorable para los aficionados al baloncesto universitario, donde veremos si South Carolina extiende su reinado o si Connecticut regresa a lo más alto después de varios años ausente. Sea cual sea el resultado, esta final será recordada como un hito en el deporte femenino.
