En un enfrentamiento emocionante, el Movistar Estudiantes casi logró llevarse la victoria contra el Betis en Sevilla, pero un ataque fulminante liderado por Benite cambió completamente el rumbo del partido. A pesar de haber estado ocho puntos arriba en el último periodo, los madrileños no pudieron mantener su ventaja frente a un equipo local que mostró una gran fortaleza en su cancha. Este revés refleja las dificultades que el Estudiantes ha enfrentado recientemente bajo la dirección de Natxo Lezkano.
El inicio del partido fue prometedor para los visitantes, quienes dominaron con precisión y defensa sólida. Sin embargo, conforme avanzaban los minutos, el Betis encontró su ritmo gracias a jugadores como Hughes y Benite, cuyas actuaciones fueron decisivas. En particular, Benite brilló al anotar ocho puntos cruciales en apenas noventa segundos, transformando una posible derrota en una victoria apretada.
El primer cuarto presentó momentos clave donde el Estudiantes parecía tomar el control del juego. Alderete, Rodríguez y Rubio contribuyeron significativamente al marcador inicial. Sin embargo, el Betis ajustó rápidamente su estrategia, aprovechando lanzamientos desde larga distancia y la fuerza interior de Olumuyiwa para revertir la tendencia. Con un marcador de 25-17 a favor de los locales, Granger emergió como figura central para reorganizar a su equipo y recuperar terreno perdido.
La segunda mitad del encuentro demostró el carácter competitivo de ambos equipos. El Estudiantes amplió su ventaja hasta alcanzar un margen de siete puntos gracias a un triple certero de Rubio. Sin embargo, Hughes mantuvo viva la esperanza del Betis con tiros imposibles desde la línea de tres puntos. Finalmente, fue Benite quien selló el destino del partido con una exhibición magistral que dejó sin palabras a los aficionados.
Aunque el resultado final favoreció al Betis, el desempeño del Estudiantes merece reconocimiento. Ambos equipos mostraron un nivel alto de competencia, lo que sugiere que cualquier enfrentamiento futuro podría ser igual de intenso. La lucha por la última plaza de ascenso sigue siendo una incógnita, pero este duelo deja claro que cada punto será disputado con uñas y dientes.
