El inicio del torneo de Indian Wells ha resultado ser desafortunado para los tenistas españoles. Durante el primer día de competencia, cuatro jugadores nacionales fueron eliminados, mientras que en la segunda jornada, Paula Badosa anunció su retirada debido a una lesión en la espalda y Alejandro Davidovich cayó en primera ronda. Con estos resultados, solo tres representantes españoles continúan en competición.
La ausencia de Paula Badosa, campeona en 2021, ha sido un duro golpe para el equipo español. La catalana, quien se lesionó durante un partido en Mérida, México, no pudo recuperarse a tiempo y decidió priorizar su salud sobre la participación en este importante evento. Esta decisión refleja la importancia de cuidar la condición física en un deporte tan exigente como el tenis.
Badosa había llegado a Indian Wells en buen estado, habiendo alcanzado las semifinales en Australia y retornando al top-10 mundial. Sin embargo, la lesión en la espalda que sufrió en Mérida obligó a la jugadora a retirarse, dejando su lugar en manos de Eva Lys. Este revés es especialmente doloroso para Badosa, quien considera este torneo uno de sus favoritos. Ahora, su objetivo es prepararse para competir en Miami dentro de dos semanas, donde espera recuperar su mejor nivel.
En el cuadro masculino, la situación no ha sido más favorable. Cuatro jugadores españoles fueron eliminados en el primer día de competición, incluyendo a Roberto Carballés, Jaume Munar, Pedro Martínez y Roberto Bautista. Además, Alejandro Davidovich, quien llegó al torneo en excelente forma tras llegar a dos finales consecutivas, también fue derrotado en su debut por Mackenzie McDonald, un jugador local invitado.
Davidovich, clasificado en el puesto 39 del mundo, enfrentó condiciones adversas, incluyendo fuertes vientos, lo que pudo haber afectado su rendimiento. A pesar de un sólido primer set, el malagueño no pudo mantener el ritmo y perdió el partido en tres sets. Este resultado significa que solo Carlos Alcaraz y Pablo Carreño siguen en competición, enfrentando ahora la presión de representar a España en un torneo que hasta ahora ha demostrado ser implacable con sus compatriotas.