Crecimiento, finanzas públicas y grado de inversión

Sep 30, 2024 at 1:53 PM

La Clave del Crecimiento Económico: Más Allá de la Inversión

La inversión ha sido tradicionalmente considerada como el motor del crecimiento económico, pero la realidad es mucho más compleja. Este artículo explora los factores clave que realmente impulsan el progreso económico a largo plazo, yendo más allá de la simple acumulación de capital. Desde las tendencias demográficas hasta la importancia de la innovación y el capital humano, descubriremos que el crecimiento sostenido requiere de un enfoque integral y estratégico.

Descubriendo los Verdaderos Motores del Progreso Económico

Más Allá de los Rendimientos Decrecientes

La teoría económica clásica ha aceptado durante mucho tiempo la idea de que la producción se caracteriza por rendimientos marginales decrecientes. Esto significa que a medida que se aumenta el acervo de capital por trabajador, la productividad marginal del capital disminuye. Este fenómeno, conocido como la "maldición de los rendimientos marginales decrecientes", ha sido ampliamente estudiado y aceptado por economistas como Solow y Swan.Sin embargo, la evidencia empírica ha demostrado que esta predicción no se ha cumplido en la práctica. A lo largo de los últimos 200 años, la mayoría de los países han experimentado un crecimiento sostenido del ingreso per cápita, en clara contradicción con las profecías malthusianas de empobrecimiento y estancamiento. Entonces, ¿qué es lo que realmente impulsa el crecimiento económico a largo plazo?

El Papel Fundamental de la Productividad Total de Factores

Los estudios han demostrado que las diferencias en la productividad total de factores, más que las diferencias en las tasas de inversión física o de capital humano, son el factor explicativo fundamental de las disparidades en el progreso económico entre países. En otras palabras, el avance sostenido de la productividad total de factores, y no simplemente la acumulación de insumos, es lo que ha permitido el crecimiento económico a largo plazo.Esto nos lleva a la teoría del crecimiento endógeno, desarrollada por economistas como Paul Romer, ganador del Premio Nobel. Según esta teoría, el crecimiento sostenido está impulsado por la innovación, la creación de nuevas ideas y la mejora en los métodos de producción y organización social. Las ideas, entendidas como instrucciones o recetas, son el verdadero motor del progreso, en contraposición a los simples objetos o insumos.

La Importancia del Capital Humano

Dentro de este marco, el capital humano desempeña un papel fundamental. La inversión en educación, salud y capacitación de la fuerza laboral no solo aumenta la productividad individual, sino que también facilita la generación y difusión de nuevas ideas, conocimientos e innovaciones. Un capital humano sólido y en constante evolución es clave para aprovechar las economías de escala y contrarrestar los rendimientos decrecientes.Sin embargo, en México, la evidencia sugiere que la inversión en capital humano se ha deteriorado en los últimos años. La "nueva escuela mexicana", los recortes presupuestarios en salud y educación, y los programas sociales que distorsionan los incentivos para la formación y el trabajo, han contribuido a este preocupante retroceso. Esto, sumado a las tendencias demográficas de envejecimiento y disminución de la población, pone en riesgo la capacidad del país para mantener e incluso aumentar el nivel de ingreso per cápita en el largo plazo.

El Papel de las Instituciones y las Políticas Públicas

Más allá de la acumulación de capital físico y humano, las teorías modernas del crecimiento endógeno destacan la importancia de las instituciones, las políticas públicas y el entorno institucional en general. Aspectos como la protección de los derechos de propiedad intelectual, la libertad, la democracia, las políticas antimonopolio y el comercio internacional, son fundamentales para fomentar la innovación, la difusión del conocimiento y el surgimiento de nuevas ideas.En este sentido, las políticas y acciones del actual gobierno mexicano, como la erosión de las instituciones, la falta de transparencia y rendición de cuentas, y el deterioro del estado de derecho, representan un obstáculo importante para el crecimiento económico sostenido. Estas tendencias, junto con la estrategia de energías fósiles y la ausencia de una participación activa del sector privado, ponen en riesgo la capacidad del país para aprovechar plenamente su potencial de innovación y progreso.

Finanzas Públicas y Crecimiento Económico

Otro factor clave para el crecimiento a largo plazo es la solidez de las finanzas públicas. El déficit fiscal elevado y la creciente deuda pública, aunados a la falta de perspectivas de crecimiento económico, plantean serios desafíos para la estabilidad macroeconómica y la capacidad del gobierno para financiar inversiones estratégicas.La posibilidad de perder el grado de inversión, como consecuencia de estas tendencias, podría desencadenar una crisis de confianza y proporciones similares a la crisis de 1994. Esto representaría un obstáculo aún mayor para el crecimiento y el desarrollo económico del país.En resumen, el crecimiento económico a largo plazo no se logra únicamente a través de la inversión, sino que requiere de un enfoque integral que considere la innovación, el capital humano, las instituciones y las finanzas públicas. Solo así México podrá aprovechar plenamente su potencial y avanzar hacia un desarrollo sostenible y equitativo.