La Cocina Clásica de España: Un Legado Culinario Más Allá de las Recetas

La nieta de Ana María Herrera Ruiz de la Herrán recuerda a su abuela con las manos llenas de harina, un ingrediente fundamental en la cocina tradicional española. Pero el Manual clásico de cocina, escrito por Herrera en los años cincuenta, trasciende más allá de las recetas, convirtiéndose en un reflejo de la sociedad y la cultura de la época. Más que un simple libro de cocina, es un testimonio de la evolución de la mujer española y de la forma en que la Sección Femenina buscó moldear el ideal de la "esposa perfecta".

Redescubriendo la Cocina Clásica Española: Más Allá de las Recetas

Más Que Recetas: Un Legado Cultural

El Manual clásico de cocina de Ana María Herrera Ruiz de la Herrán no es solo un libro de recetas, sino un reflejo de la sociedad española de los años cincuenta. En una época en la que las despensas eran limitadas y algunos ingredientes eran difíciles de encontrar, Herrera ofreció a las mujeres españolas un amplio repertorio de técnicas culinarias, equivalencias de pesos y medidas, y hasta consejos para trinchar un ave o preparar un buen café. Más allá de las recetas, el libro se convirtió en una guía indispensable para las amas de casa, enseñándoles a sacar el máximo provecho de los recursos disponibles.

La Sección Femenina y la Construcción de la "Esposa Perfecta"

La Sección Femenina, organización femenina del régimen franquista, desempeñó un papel fundamental en la difusión del Manual clásico de cocina. Aunque la organización buscaba llegar a las mujeres más humildes, el libro estaba dirigido a un público relativamente culto, con recetas que iban más allá de la cocina regional. Esto formaba parte de la estrategia de la Sección Femenina de promover una imagen de la mujer española como "esposa perfecta": abnegada, cristiana y experta en las labores domésticas, incluyendo la cocina.

Más Allá de las Recetas: La Apropiación de la Autoría

Uno de los aspectos más interesantes del Manual clásico de cocina es la historia de su autoría. Aunque el libro fue escrito por Ana María Herrera Ruiz de la Herrán, la Sección Femenina se apropió del trabajo de la autora, llegando incluso a atribuir la obra a otra de sus militantes, Anita Asensio. Esta práctica de apropiación sistemática de trabajos ajenos era común en la organización, que buscaba aumentar su prestigio y obtener más subvenciones. Sólo después de la disolución de la Sección Femenina, en 1977, la familia de Herrera pudo recuperar los derechos de la obra.

La Cocina como Herramienta de Propaganda

El Manual clásico de cocina formaba parte de un engranaje de propaganda más amplio que la Sección Femenina puso en marcha para consolidar el imaginario de la mujer nacionalcatólica. A través de la publicación de libros y revistas que abordaban temas como moda, puericultura y, por supuesto, cocina, la organización buscaba moldear el ideal de la "esposa perfecta": una mujer abnegada, cristiana y experta en las labores domésticas. Herrera, consciente de su público, supo adaptar su obra a este contexto, ofreciendo recetas sencillas y sofisticadas para mujeres cada vez más ocupadas.

Más Allá de las Recetas: El Legado de Ana María Herrera

Más allá de su éxito como autora del Manual clásico de cocina, la figura de Ana María Herrera Ruiz de la Herrán ha sido prácticamente invisibilizada. Nacida en Málaga, Herrera se formó en la Academia de Gastrónomos de Madrid y trabajó como profesora de cocina en diversas escuelas y para la Sección Femenina. Su obra, que incluye también títulos como Cocina regional española y Recetario para olla a presión y batidora eléctrica, demuestra su profundo conocimiento de la cocina española y su capacidad para adaptarse a las necesidades de su tiempo. Lamentablemente, la apropiación de su trabajo por parte de la Sección Femenina ha relegado su nombre al olvido, a pesar del impacto que tuvo su Manual clásico de cocina en la formación culinaria de varias generaciones de mujeres españolas.