El reformista Pezeshkian gana las elecciones presidenciales en Irán

Jul 6, 2024 at 4:43 AM

Irán elige a un reformista como su próximo presidente

Masud Pezeshkian, un médico de 69 años con ascendencia azerí y kurda, ha sido elegido como el próximo presidente de Irán tras ganar la segunda vuelta de las elecciones con el 53,6% de los votos. Pezeshkian, quien se presenta como un candidato reformista, se impuso al conservador Said Jalili, que obtuvo el 44,3% de los sufragios. Esta victoria marca un giro significativo en la política iraní, ya que Pezeshkian se perfila como una figura más moderada y abierta al diálogo en comparación con su predecesor, el ultraconservador Ebrahim Raisi, fallecido recientemente en un accidente de helicóptero.

Un cambio de rumbo en la política iraní

Trayectoria y perfil de Masud Pezeshkian

Masud Pezeshkian es un médico de 69 años que lleva más de dos décadas en la política iraní. Después de participar en la guerra contra Irak en la década de 1980, Pezeshkian se incorporó al mundo académico, llegando a dirigir la Universidad de Ciencias Médicas de Tabriz en los años noventa. Su carrera política despegó en el año 2000, cuando se convirtió en viceministro de Salud durante la presidencia del reformista Mohamad Jatami, a quien posteriormente sucedería al frente de la cartera ministerial. Más tarde, en 2008, Pezeshkian ingresó en el Parlamento, donde llegó a ocupar el cargo de vicepresidente entre 2016 y 2020.En esta ocasión, Pezeshkian se presentó como candidato a la Presidencia, convirtiéndose en el único reformista que logró superar el corte impuesto por las autoridades. Su campaña electoral le permitió recabar importantes apoyos dentro del espectro político reformista, especialmente del expresidente Hasán Rohani, quien lo respaldó abiertamente.

Un perfil moderado y crítico con la represión

A pesar de que Pezeshkian se ha comprometido a respetar los principios de la República Islámica y las líneas marcadas por el líder supremo, el ayatolá Alí Jamenei, es conocido por mantener una postura crítica frente a la dura represión ejercida por las autoridades contra el Movimiento Verde tras las elecciones presidenciales de 2009. Asimismo, durante las recientes protestas desencadenadas por la muerte de Mahsa Amini, Pezeshkian no dudó en señalar que las fuerzas de seguridad eran responsables de la situación, afirmando que "es nuestra culpa. Queremos aplicar la fe religiosa a través del uso de la fuerza. Eso es científicamente imposible".

Retos y expectativas del nuevo presidente

La victoria de Pezeshkian en las elecciones presidenciales de Irán abre la puerta a un posible cambio de rumbo en la política del país. Como presidente, Pezeshkian tendrá que hacer frente a una serie de desafíos, entre los que se encuentran la delicada situación económica, las tensiones geopolíticas y la necesidad de restablecer el diálogo con la comunidad internacional. Asimismo, deberá lidiar con la compleja estructura de poder en Irán, donde el líder supremo, Alí Jamenei, ejerce una influencia decisiva en los asuntos estratégicos.A pesar de estas limitaciones, muchos observadores esperan que Pezeshkian pueda impulsar un proceso de apertura y reformas, alejándose de la línea ultraconservadora de su predecesor. Su perfil moderado y su disposición al diálogo podrían facilitar la reanudación de las negociaciones sobre el programa nuclear iraní, así como la mejora de las relaciones con Occidente. No obstante, el nuevo presidente deberá navegar con cautela en un entorno político dominado por los sectores más conservadores, que podrían obstaculizar sus iniciativas reformistas.