Padres que venden en el tren con niños se defienden: No tienen con quien dejarlos
Jun 26, 2024 at 10:00 AM
Madres Inmigrantes Luchan por Sobrevivir: Vendiendo Dulces con Sus Hijos en las Calles de Nueva York
En las calles y parques de la Gran Manzana, se ha vuelto cada vez más común ver a mujeres inmigrantes con bebés colgados a sus espaldas o a menores solos ofreciendo dulces y chocolates. Esta práctica, que ha aumentado desde el año pasado con la llegada de una ola de migrantes a Nueva York, ha generado controversia y debates sobre cómo abordar esta situación de una manera compasiva y efectiva.Una Realidad Cruda: Madres Inmigrantes Luchando por Sobrevivir
Barreras Sistémicas y Falta de Apoyo
Una encuesta realizada por la Coalición de Inmigración de Nueva York (NYIC) y la organización Algún Día reveló que la gran mayoría de estos vendedores, en su mayoría mujeres y menores ecuatorianos, carecen de acceso a servicios de cuidado infantil gratuitos o a bajo costo, y no tienen un techo permanente. El 42% de los encuestados señaló que uno de los mayores obstáculos es no tener con quién dejar a sus hijos, lo que les impide aceptar trabajos. Además, el 64% asegura vivir fuera del sistema de albergues, sin un hogar estable.Necesidad Apremiante y Riesgos Asumidos
A pesar de los desafíos y los riesgos que enfrentan, el 88% de los vendedores afirmó que comenzaron a vender por necesidad. Muchos temen incurrir en multas o interactuar con la policía durante sus jornadas de venta, pero aun así lo hacen porque no tienen otra alternativa. Una vendedora del metro, originaria de Cuenca, Ecuador, expresó: "Qué más puedo hacer si aquí todo es muy caro y no tenemos familia que nos cuide a los niños. No lo voy a dejar solito por ahí encerrado".Aspiraciones Frustradas y Falta de Oportunidades
El 83% de los vendedores informales recién llegados que trabajan con sus hijos tienen aspiraciones de tener mejores empleos, pero no han podido hacerlo realidad debido a las limitaciones en el cuidado de los niños. Incluso los beneficiarios actuales de programas de apoyo como Promise NYC temen que si el presupuesto municipal no destina $25 millones en financiamiento, se queden sin esos servicios, lo que empeora aún más el panorama para los recién llegados con niños.Estigmatización y Falta de Empatía
Muchos neoyorquinos critican la presencia de niños en el comercio informal, y algunos incluso piden medidas severas para evitarlo. Una residente panameña, Gloria Martínez, expresó su molestia y aseguró que algunas madres estarían "usando la lástima" para ganar dinero. Sin embargo, defensores de inmigrantes argumentan que detrás de esta práctica hay una inmensa necesidad que las empuja, y que no se debe criminalizar a estos vendedores.Llamado a la Acción: Soluciones Propuestas
Ante esta situación, la Coalición de Inmigración de Nueva York (NYIC) y líderes de la ciudad han hecho un llamado a la administración municipal para que, en lugar de señalar a los padres, se desplieguen programas que los ayuden y les brinden mejores oportunidades. Entre las recomendaciones presentadas, se pide una inversión de $25 millones en el programa Promise NYC para proporcionar vales de cuidado infantil, restaurar $4 millones en la Iniciativa de Comunicación y Divulgación de Familias Inmigrantes, y priorizar el acceso a los programas Summer Rising y After School. Además, se exige la despenalización de la venta ambulante para eliminar sanciones penales a los vendedores.Compromiso y Acción Necesarios
Funcionarios como el Contralor Brad Lander y líderes del Concejo Municipal, como Adrienne Adams y Jennifer Gutiérrez, han expresado su apoyo a estas familias y han hecho un llamado a la acción. La concejal Shahana Hanif incluso criticó al alcalde Eric Adams por proponer eliminar el programa Promise NYC, señalando que es esencial para apoyar a los nuevos neoyorquinos. La administración Adams, por su parte, afirma haber intensificado sus esfuerzos para garantizar que los niños de migrantes recién llegados vayan a la escuela y haber reducido el costo de los programas de cuidado infantil.En resumen, esta situación refleja las barreras sistémicas y la falta de apoyo que enfrentan las familias inmigrantes en la ciudad de Nueva York, obligándolas a tomar decisiones difíciles para sobrevivir. Invertir en programas de cuidado infantil, vivienda y despenalización de la venta ambulante podría marcar la diferencia y crear un entorno más seguro y de apoyo para que estos nuevos neoyorquinos puedan prosperar.