Blindaje externo del país se fortalece, pero se debilita el fiscal

Aug 14, 2024 at 7:20 AM

México Fortalece su Blindaje Financiero para Enfrentar Choques Externos

México se encuentra en una posición más sólida para hacer frente a posibles shocks externos en 2024, cuando comience el próximo gobierno, en comparación con el inicio de la administración actual. Sin embargo, los analistas advierten que los cimientos de los fondos de estabilización para rescatar las finanzas públicas ante caídas en los ingresos petroleros y fiscales son mucho más débiles en la actualidad.

Blindaje Financiero Reforzado, pero Menor Protección Fiscal

Reservas Internacionales y Línea de Crédito Flexible Fortalecen el Escudo Externo

Los indicadores del Banco de México muestran que el blindaje total ante choques foráneos que tiene hoy la economía mexicana, conformado por las reservas internacionales y la Línea de Crédito Flexible (LCF) con el FMI, suma 258 mil 825 millones de dólares, más que los 249 mil 167 millones de dólares reportados al cierre de 2018. Esto refleja un aumento significativo en la capacidad del país para hacer frente a posibles turbulencias externas.Las reservas internacionales, que actualmente se encuentran en un récord de 223 mil 233 millones de dólares, sumadas a la LCF con el FMI, de 35.6 mil millones de dólares, conforman un monto bastante amplio de recursos para procurar la estabilidad cambiaria. Esto representa una mejora considerable en comparación con 2018, cuando las reservas internacionales se ubicaron en 172 mil 802 millones de dólares y la LCF era de 74 mil 374 millones.Además, México mantiene abiertas líneas de intercambio de dólares con la Reserva Federal de Estados Unidos y el Tesoro estadounidense, lo que proporciona acceso a fondos extraordinarios en caso de eventos que puedan generar presión sobre la cuenta corriente o la balanza de pagos.

Deterioro de los Fondos de Estabilización Fiscal

En contraste con el fortalecimiento del blindaje externo, los recursos de los fondos de estabilización se han desplomado desde 398 mil 558 millones de pesos al concluir 2018 a 69 mil 382 millones de pesos a junio de este año, según los registros de la Secretaría de Hacienda. Esto representa una disminución significativa en la capacidad del gobierno para hacer frente a choques internos que puedan afectar los ingresos fiscales.Específicamente, los recursos del Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios (FEIP), considerado el fondo de rescate más importante para las finanzas públicas, se han diluido desde 279 mil 771 millones de pesos al cierre de 2018 a 49 mil 304 millones a junio de este año.Analistas como Adrián Arias, director de Estudios Económicos de Citibanamex, y Víctor Gómez Ayala, director de Analítica de Datos del IMCO, coinciden en señalar que este deterioro en los activos financieros del sector público, que han disminuido en 2 puntos porcentuales del PIB, representa un mayor riesgo para la economía mexicana en comparación con el inicio de la administración actual.

Riesgos Externos Persisten, Pese a Fortaleza del Sistema Financiero

Si bien el sistema financiero mexicano se mantiene sólido, los expertos advierten que aún persiste el peligro de una recesión en Estados Unidos, aunque bajo, que podría afectar a México. Esto, sumado a la disminución de los recursos de los fondos de estabilización, genera un panorama con mayores riesgos para la economía nacional.Según los economistas del Banco de México, el "escudo" que tiene el país es más "psicológico que nada" ante la posibilidad de un choque externo de gran magnitud, ya que el régimen cambiario flexible permite que el tipo de cambio sea el principal mecanismo de ajuste ante cualquier shock. Sin embargo, reconocen que los recursos de los fondos de estabilización se han visto mermados, lo que podría limitar la capacidad del gobierno para responder a una crisis interna.En general, los expertos coinciden en que, si bien México ha fortalecido su blindaje externo, la disminución de los recursos de los fondos de estabilización representa un riesgo que debe ser atendido para garantizar la solidez de las finanzas públicas y la capacidad de respuesta del país ante posibles choques, tanto externos como internos.