Mis Hijos, Mi Orgullo: Una Celebración del Día del Padre

Palabras Clave:HIJOSFAMILIAPATERNIDADLEGADOFUTUROResumen:1. José Julián: El Atleta Apasionado2. Alma Aitana: La Niña Chispeante3. Ananda: La Hija Afín4. La Pequeña Sorpresa: Esperando con AmorComo padre, no hay nada más gratificante que ver cómo nuestros hijos crecen y se convierten en individuos únicos, cada uno con su propia personalidad y pasiones. En este Día del Padre, me siento honrado de poder compartir con ustedes las historias de mis tres hijos y la hija que está en camino, cada uno ocupando un lugar especial en mi corazón.

Una Celebración de la Paternidad: Historias de Amor y Orgullo

José Julián: El Atleta Apasionado

José Julián, mi hijo mayor, nació el 12 de enero de 2009 y ahora tiene 15 años. A pesar de su estatura imponente y su voz grave, sigue siendo mi niño, y a veces me cuesta tratarlo como un adulto. Desde que llegó al mundo con un distrés respiratorio que lo llevó directamente a la incubadora, José Julián ha sido un niño excepcional.Es un joven de carácter serio y aparentemente callado, pero que se transforma cuando está rodeado de amigos. Es un líder nato en las fiestas y reuniones, disfrutando de la compañía de sus seres queridos. Sin embargo, su verdadera pasión se encuentra en el campo de juego, donde se convierte en un jugador apasionado y dedicado.Recuerdo con claridad el día en que me pidió practicar fútbol, con la determinación de un futuro campeón. Desde entonces, no ha dejado de entrenar y jugar, convirtiéndose en una estrella en ciernes. Uno de mis mayores placeres es verlo en acción, anotando goles y soñando con convertirse en una figura del fútbol profesional.Aunque no he podido estar presente en algunos de sus últimos eventos, como su graduación y partidos, sé que José Julián sigue siendo el mismo niño bueno y callejero que siempre ha sido. Su sueño de jugar para la selección cubana, a pesar de residir en Florida, es una muestra de su amor por su país de origen y su deseo de contribuir a su desarrollo.

Alma Aitana: La Niña Chispeante

Alma Aitana, mi hija menor, nació el 12 de junio de 2018. A punto de cumplir 6 años, es una niña llena de chispa y alegría, con una risa contagiosa y unos ojos que reflejan su gracia y vitalidad. Al igual que su hermano, Alma es una observadora atenta de los asuntos de los adultos, mostrando un gran interés por el chisme y las conversaciones de los mayores.Me encanta el sentido del humor de mi hija y su facilidad para captar el ambiente a su alrededor. Desde pequeña, le he enseñado a disfrutar de los chicharrones, aunque también es fanática de las gomitas de colores y otras golosinas. Verla y escucharla hablar inglés con tanta fluidez me asombra, considerando que hace menos de tres años estábamos en Cuba y ahora ella y su hermano se encuentran en Miami, mientras yo estoy en Barcelona.Aunque la distancia nos separa, mantengo una conexión estrecha con Alma a través de los mensajes de WhatsApp, donde le escribo poemas y cuentos cortos para alimentar su imaginación y su amor por las palabras. Saber que no podré estar presente en su próximo cumpleaños me entristece, pero sé que el amor que compartimos trasciende las fronteras.

Ananda: La Hija Afín

Ananda, mi hijastra, es una niña de casi 5 años que ha entrado en nuestras vidas hace poco más de un año. A pesar de no ser mi hija biológica, la experiencia de cuidarla y compartir con ella ha sido una prueba de que el amor y la responsabilidad pueden construirse de múltiples formas.Ananda es una niña fascinante, que habla constantemente con los seres vivos e inanimados, sin hacer distinción entre sujetos y objetos. La veo danzar y bailar por las aceras, esquivando a los transeúntes con gracia y alegría. Con ella, he aprendido nuevas palabras en catalán y le he enseñado expresiones y giros cubanos, para que su español sea una mezcla única de acentos y pronunciaciones.Ananda me pregunta constantemente cuándo vendrán a visitarnos sus hermanos, José Julián y Alma, y espera con ilusión la llegada de la hermanita que aún está en el vientre de su madre. Es una niña llena de curiosidad y cariño, que ha logrado ganarse un lugar especial en mi corazón.

La Pequeña Sorpresa: Esperando con Amor

Aún no hemos decidido el nombre de nuestra próxima hija, que está previsto que nazca en octubre. Por ahora, la llamamos cariñosamente "la pequeña sorpresa". Durante el embarazo, he podido sentir sus movimientos incesantes, como si fuera un reguilete que no se detiene. Las ecografías muestran a una niña inquieta, que parece disfrutar de un tiovivo interminable.Aunque todavía no la conozco en persona, ya siento un profundo amor por ella. Cuando su madre me llama para que sienta sus movimientos, me lleno de emoción y disfruto de esos momentos de conexión. Al igual que con sus hermanos, espero poder enseñarle a disfrutar de los chicharrones, una tradición familiar que parece estar arraigada en nuestros genes.Mi mayor deseo para el Día del Padre sería que mis hijos e hija no estuvieran tan lejos unos de otros, y que pudiéramos reunirnos sin necesidad de pasaportes ni visas. Anhelo el día en que los continentes se unan y pueda llegar caminando a todos los lugares donde se encuentran mis seres queridos.