Voramar: Donde la Pasión Culinaria y la Tradición Familiar se Funden en una Experiencia Gastronómica Inolvidable

En el corazón de Portbou, un pequeño pueblo costero en la frontera entre España y Francia, se encuentra el restaurante Voramar, un oasis de excelencia culinaria que trasciende las fronteras de lo ordinario. Aquí, la familia Jamás-Garbí ha tejido una historia de dedicación, innovación y amor por la gastronomía, creando un espacio donde la tradición y la modernidad se funden en una sinfonía de sabores memorables.

Donde la Pasión por la Cocina se Hereda de Generación en Generación

Raíces Profundas en la Hospitalidad

Las raíces de Voramar se remontan a 30 años atrás, cuando Domingo Jamás Cortada y su esposa María José Garbí Macías atendían un bar en el mismo lugar. Desde entonces, la obsesión por los detalles y la excelencia en el servicio ha sido el sello distintivo de esta familia. Miriam Jamás, hija de Domingo y María José, recuerda haber crecido entre las mesas y la cocina, absorbiendo el compromiso de sus padres por el oficio.

Transformando un Sueño en Realidad

Aunque Domingo y María José alentaban a sus hijos a buscar su futuro lejos de la gastronomía, Miriam, después de estudiar turismo, regresó a Portbou para trabajar en el bar familiar. Allí conoció a su marido, el chef Guillem Gavilán Codol, y en 2013 decidieron transformar el bar en un restaurante. Fue un comienzo difícil, con pérdidas económicas durante los primeros años, pero la familia se mantuvo firme en su visión de crear un espacio que reflejara su pasión por la cocina.

Reconocimiento y Crecimiento

A pesar de los desafíos que enfrentan los negocios en Portbou, Voramar ha logrado destacarse en el panorama gastronómico. Desde 2019, el restaurante está recomendado en la guía Michelin y, a partir de este año, también en la guía Repsol. "Estamos en continuo crecimiento y creemos mucho en lo que hemos creado", afirma Miriam, quien junto a su familia sigue trabajando incansablemente para llevar la experiencia de Voramar a nuevas alturas.

Una Familia Unida por la Pasión

Cada miembro de la familia Jamás-Garbí aporta una singularidad única al funcionamiento de Voramar. Miriam y su padre, Domingo, ofrecen su hospitalidad en la sala; su marido, Guillem, y su hermano, Pau, realizan sus creaciones en la cocina; mientras que su madre, María José, cuida meticulosamente los detalles de la mantelería. "Hemos dedicado mucho tiempo a construir una identidad y quizás el concepto que mejor nos define es el amor por nuestro trabajo", comparte Miriam.

Más que una Experiencia Gastronómica: Vender Felicidad

Para la familia Jamás-Garbí, la gastronomía ha sido una gran satisfacción y su objetivo es compartir esa alegría con los demás. "Ha llegado a un punto que este tipo de gastronomía se ha convertido en vender felicidad", explica Miriam. Cada plato, cada detalle, cada gesto de hospitalidad, está impregnado de la pasión y el compromiso que esta familia ha cultivado a lo largo de los años.

Fusión de Tradición y Modernidad en la Cocina

Bajo la dirección del chef Guillem Gavilán y el pastelero Pau Jamás, la cocina de Voramar es una sinfonía de sabores que fusiona tradición y modernidad. Los menús degustación, Petit Voramar y Gran Voramar, se centran en productos de temporada que reflejan la combinación de mar y montaña. "Debe ser un engranaje perfecto para funcionar, es como un reloj; no se trata de destacar un plato estrella, sino de asegurar que todo funcione en armonía", explica el chef.

Una Joya Oculta Esperando ser Descubierta

Aunque Portbou ha experimentado una disminución en la afluencia turística a lo largo de los años, Voramar se ha convertido en una joya oculta, lista para ser descubierta por los amantes de la alta gastronomía. "La gente del pueblo valora que hoy Portbou esté ganando reconocimiento en el ámbito gastronómico", comenta Miriam. Con su enfoque en la excelencia, la innovación y la hospitalidad, Voramar se ha posicionado como un destino imprescindible para aquellos que buscan una experiencia culinaria memorable.